Este artículo está orientado a aquellos profesionales que buscan equipos para realizar tratamientos de crioterapia localizada. Para uso en fisioterapia, tratamientos de belleza, o recuperación deportiva.
La crioterapia localizada se utiliza con diversos fines según el profesional y el equipo utilizado. Desde hace muchos años se aplica frío localizado para quemar pequeñas verrugas o como método quirúrgico. Pero nos vamos a enfocar en los equipos que se utilizaron en un principio para fisioterapia o kinesiología con fines analgésicos y antiinflamatorios, para luego ser también utilizados en tratamientos de belleza (que es en estos momentos su mayor demanda).
Lo primero que queremos destacar son los diferentes métodos que tienen para poder "soplar" un aire de temperaturas tan bajas. Para ello los diferentes fabricantes utilizan nitrógeno liquido, compresores o dióxido de carbono.
En su uso diario la principal diferencia es que los que utilizan nitrógeno o dióxido necesitan ser rellenados por una empresa de gases local una, dos o tres veces por semana dependiendo de la frecuencia con que se utilicen. Los que llevan un compresor eléctrico dentro solo se enchufan a la corriente y están listos para trabajar.
Otra diferencia notable es que los equipos que funcionan con nitrógeno soplan un vapor más frío pero con menos flujo de aire (más suave). Los eléctricos no alcanzan temperaturas tan bajas pero tienen una turbina que hace fluir mucha más cantidad de aire. Los que funcionan con dióxido de carbono son una combinación de los dos, alcanzan temperaturas bajas y soplan el aire bastante fuerte.
No es la intención de este articulo generar una opinión sobre que sistema es mejor, solo brindamos información para que cada profesional evalúe cual se adapta mejor a sus necesidades. Tenemos clientes de los diferentes sistemas y todos están satisfechos con los resultados, creemos que la clave está en conocer las diferentes opciones que existen y elegir bien.
La elección dependerá de los siguientes factores:
- Si la ciudad donde se va a trabajar dispone de un suministro de nitrógeno con precio razonable y un servicio de logística frecuente y fiable.
- El uso y la frecuencia con que se utilizará el equipo.
- La tecnología que el profesional necesite que incluya el equipo de crioterapia.
Enumeraremos las diferencias en sus características debido a la tecnología que incluyen. En este punto si que queremos destacar diferencias importantes entre los diferentes equipos, que cada profesional evaluará su importancia dependiendo del uso que le va a dar al equipo y su experiencia previa realizando tratamientos de crioterapia localizada.
Todos equipos que utilizan nitrógeno líquido, lo almacenan en un recipiente criogénico de entre 30 y 60 litros de capacidad que se llama Dewar, como si fuese un termo gigante. Recordemos que el nitrógeno líquido se encuentra en bullición a -190º y necesita un almacenamiento especial.
Dentro de estos termos hay una vara de metal desde la boca superior de entrada hasta el fondo, cuando esta se calienta provoca una diferencia de temperatura tan grande que genera vapor. Debido a la presión, este vapor necesita salir del termo, y lo hace por un tubo que luego el profesional dirige hacia el lugar de aplicación.
Hasta aquí no hay diferencias en cuanto a la forma de usar el nitrógeno. Pero los equipos de ingeniería de los diferentes fabricantes desarrollan características que los hacen muy diferentes (también en el precio)
Las siguientes son las opciones que se pueden encontrar ordenadas desde los equipos más sencillos a complejos:
- Dewar visible, botón encendido y apagado, y una rueda giratoria que activa mayor o menor calor en la vara de metal variando el flujo de aire.
- Dewar cubiertos por el frente o en su totalidad dentro de una estructura. Pantalla digital con opciones reguladoras de flujo de aire, tiempo de tratamiento y nivel de nitrógeno restante.
- Punteros láser indicando correcta distancia de aplicación, protocolos de tratamientos en pantalla, medidores de temperatura en la piel con luces indicativas, parada de fluido del aire en caso de detectar un excesivo frío en la piel que puede causar quemaduras.
Equipo con enfriamiento mediante nitrógeno líquido. Frío en forma de vapor, color blanco, sin presión.
La opción de los equipos para crioterapia que funcionan con un compresor eléctrico es muy diferente. Aquí no se depende del nitrógeno, todo se basa en la potencia de compresor y motor para enfriar el mismo aire del lugar. Si bien no hay tanta diferencia entre los diferentes modelos en cuanto a la temperatura que alcanza el aire, si que es importante saber que la potencia del motor influye en la cantidad de tiempo sin parar que se puede utilizar. Por este motivo es importante estimar con que frecuencia se piensa utilizar el equipo, para elegir entre las diferentes opciones teniendo en cuenta que los precios se duplican desde el más económico al mas caro.
Equipo eléctrico. Frío sin emisión de ningún gas, incoloro, con presión.
Y por último queremos hablar de los únicos equipos portátiles que existen a día de hoy, ideales para aquellos profesionales que realizan tratamientos fuera de consulta.
Enfrían mediante dióxido de carbono medicinal. Este gas hay que comprarlo a las empresas gasistas locales y los venden en garrafas de ente 6 y 30 kilos.
Todo el equipo es una pieza de mano de solo 400 gramos, y en su pantalla tiene incluida todas las funciones en forma digital como tiempo de tratamiento, temperatura deseada y protocolos. Ademas disponen puntas con diferentes diámetros para poder ser utilizadas en distintas partes el cuerpo incluido uso veterinario.
Equipo crioterapia portátil
Los invitamos a hacer click en el siguiente link para encontrar información más específica de cada uno de los equipos para crioterapia localizada mencionados.